miércoles, 10 de abril de 2013

La Ansiedad

    Todas las personas sienten miedo alguna vez y es algo muy normal. De hecho, muchos individuos están preocupados la mayor parte del tiempo y piensan sobre el elevado porcentaje de criminalidad, las dificultades para llegar a fin de mes, mantener el empleo o buscarlo y las enfermedades, entre otras cosas. Por ejemplo, si a usted no le inquieta conservar su puesto de trabajo o salir bien en la universidad, probablemente no trabajaría lo suficiente y haría todo mal. Inquietarse es útil pero traspasar los límites causaría cualquier trastorno de ansiedad.


¿Por qué se produce?
    En la mayoría de los casos los trastornos de ansiedad se desencadenan debido al modelaje familiar. En las personas con familias disfuncionales o con problemas de adicción es más probable que la herencia desempeñe un rol. Tal parece que la alarma contra el miedo es demasiado activa en las personas que sufren de trastornos de ansiedad. Esto no significa, como comúnmente se piensa, que su carácter sea débil o que exista un problema de personalidad. Situaciones de ajetreo y el estilo de vida que lleve la persona es lo que hace que se desencadene la ansiedad. 

¿Cómo reconocerla?
    Existen muchos tipos de ansiedad y la misma se refleja en personas de todas las edades. Niños, jóvenes y adultos pueden padecerla a través de diferentes manifestaciones. Una de las más comúnes es la ansiedad social, la cual se refleja en estudiantes o profesionales excelentes que tienen buen nivel intelectual.
    La generalizada es otra de las más frecuentes y se expresa de manera fluctuante porque va y viene. Su característica más habitual es que la persona es aprehensiva, llena de temores, muy precavida y se agota con frecuencia porque vive alarmada. Puede incluso llegar a tener fallas en sus funciones motoras.
    El pánico es un tipo de ansiedad en crisis porque hay una descarga de adrenalina desproporcionada. Se manifiesta a través de síntomas físicos como palpitaciones muy aceleradas, dificultad para respirar, labios resecos, tensión muscular, extremidades frías y sudorosas, dolor en la boca del estómago, náuseas, diarrea y mareo.


¿Qué hacer?
*Hacer ejercicios es una de las recomendaciones más acertadas para bajar el nivel de ansiedad, el mismo ayuda a una tonificación muscular, evitando tanto la rigidez como el exceso de activación del sistema nervioso.


*Mantener buenos hábitos de alimentación y de sueño, si el cuerpo descansa y está bien alimentado es muy poco probable que desencadene tales estados de ansiedad.


*Planificar un buen plan de actividades evitará cualquier tipo de sobrecarga y de situación de estrés, es una herramienta muy conveniente para rebajar tensiones, sabiendo intercalar descansos oportunos para aliviar el crecimiento de la ansiedad.


*Asistir al médico si el nivel de ansiedad es muy elevado. A través de un abordaje integral y un diagnóstico podrá conocer la psicoterapia cognitiva conductual como la manera más fácil que utilizan los especialistas para tratar trastornos de esta índole.


*Evitar bebidas que contengan componentes que puedan alterar su sistema nervioso como el café, antigripales y el alcohol.


*Aplicar técnicas de relajación como respiración y yoga.


*Tener actividades sociales, compartir con amigos, hacer vínculos y reforzar la amistad son alicientes positivos para bajar los estados de ansiedad.

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